El uso de equipos informáticos o cualesquiera otros dispositivos proporcionados para la realización de la actividad laboral por la empresa (pen drives, móviles, smartphones, ordenadores, correo electrónico o internet) se considerarán herramientas de trabajo susceptibles del control por parte del empresario.
Por lo que respecta al email, la realidad pone de manifiesto que con frecuencia el trabajador usa el correo corporativo como una herramienta de uso particular.
Es por ello, que la empresa ha de regular siempre el tratamiento y el uso que se le debe dar a los recursos que pone a disposición de los trabajadores, estableciendo las medidas que estime más oportunas de vigilancia y control para la verificación del cumplimiento por parte de los trabajadores de sus obligaciones laborales.
Sin embargo, dicha facultad empresarial se encuentra limitada por el respeto a la dignidad del trabajador y a los derechos fundamentales a la intimidad personal y al secreto de las comunicaciones.
Requisitos para realizar un control empresarial del email
Las empresas pueden revisar y vigilar el uso que le dan sus trabajadores a los medios informáticos que ponen a su disposición, pero siempre y cuando se cumplan una serie de requisitos.
· Notificar previamente a los trabajadores la posibilidad de seguimiento y vigilancia por parte de la empresa.
· Comprobar el grado de intrusión en la intimidad del empleado. El control debe ser lo menos invasivo posible.
· Presentación por parte del empresario de razones legítimas para justificar el control de las comunicaciones y el acceso a su contenido.
Estos factores deben ser valorados por los tribunales nacionales para realizar la ponderación de los intereses en conflicto (poder disciplinario del empresario frente al derecho a la intimidad y al secreto de la correspondencia del trabajador) y determinar así si la monitorización es ajustada a derecho.
Por tanto, digamos que la organización puede vigilar los correos internos y las redes sociales de sus profesionales, utilizadas desde los dispositivos facilitados por la empresa, pero teniendo en cuenta aspectos muy claros y determinantes.